Este fin de semana he acudido al workshop de la sociedad europea de reproducción humana y embriología (ESHRE) sobre el peso -o no- de la herencia genética titulado “Genes vs. Children: genetic inheritance and options in fertility care” que viene a ser algo así como “Genes vs. Hijos: La herencia genética y las opciones dentro de los tratamientos de fertilidad”.
Han sido un par de días muy intensos en los que hemos debatido sobre aspectos como el anonimato o no de la donación de gametos, los aspectos clave a la hora de afrontar un tratamiento, o la importancia de los vínculos genéticos, sociales o emocionales.
¡Aquí abajo dejo una serie de puntos clave sobre los que debatimos estos días! (Y mis divagaciones personales)
1.- Es vital concienciar a la población sobre la (In)Fertilidad.
Al ser conscientes de nuestra fertilidad y de nuestras opciones, seremos capaces de tomar decisiones más conscientes.
Y es que, muchas veces creemos que buscar un embarazo va a ser tan fácil como evitar los medios anticonceptivos, pero en muchos más casos de los que creemos, la realidad es bien distinta.
2.-Antes de empezar un tratamiento es muy recomendable informarse y buscar asesoramiento psicosocial. Este apoyo nos ayudará a tomar consciencia y afrontar los retos que se nos planteen antes, durante y después del tratamiento, de manera más eficiente y saludable.
3.-¿De qué hablamos cuando hablamos de tasa de éxito?
Este tema da para mucho, y lo abordaré en futuros post, porque creo que es importante saber “leer entre líneas” para entender de qué nos hablan cuando nos dicen X% de tasa de embarazo.
No es lo mismo concebir el éxito de un ciclo como un test en orina positivo, que un embarazo con bebé sano en casa. Y supongo (llámame loca aventurada), que todas las personas que acuden a un centro de fertilidad, lo que quieren es tener un bebé entre sus brazos los antes posible, y no acumular muchos test de doble rayita que no hayan evolucionado hasta ser una personita.
4.-La importancia del vínculo.
Hay muchas maneras por las cuales nos vinculamos con las personas, unas de ellas serían los vínculos genéticos, los sociales o los emocionales:
El vínculo genético (hablamos de este tipo de vínculo si usamos los gametos propios)
El vínculo social (el que asociamos a un grupo concreto o a una familia)
El vínculo emocional (el que nos une con personas que queremos, nos quieren o nos hacen sentir bien)
Si tuvieras que elegir uno de estos tres: ¿Cuál dirías que es más importante para ti?
5.-Secretos, tabús y moral.
Tanto se decidimos realizar un tratamiento con nuestros propios gametos, como si lo realizamos con un donante genético, los aspectos que decidamos guardar en secreto nos pueden dar pistas sobre cómo percibimos nuestra propia (in)fertilidad.
6.-Si has decidido contar a tu entorno que vas a realizar un tratamiento de fertilidad, es aconsejable que a tus hijos, también se lo cuentes.
7.-¿Es la maternidad:paternidad algo relacionado con la genética, o es un concepto más relacionado con la formación de una “familia”, o de los cuidados?
Cuando se usan gametos donados, me gusta hablar de donante genético. Tanto si usamos óvulos como semen donado, esas células aportarán parte de la carga genética del futuro embrión, pero no considero que sea correcto denominarles “padres” o “madres” ya que creo que esas figuras están más ligadas a los cuidados y al apego, independientemente de su vínculo genético.
8.-¿Hasta dónde somos capaces de llegar para lograr nuestro objetivo de ser madres:padres?
El deseo por tener un bebé y formar una familia nos puede llevar por caminos que nunca hubiésemos pensado que íbamos a transitar. No todas las opciones para llegar a la meta “del bebé” son válidas para todo el mundo. Lo que para alguien puede ser un paso poco trascendente, para otra persona puede ser una decisión que requiera replantearse muchas cosas. Por eso es importante que antes de embarcarnos en cualquier aventura, nos informemos bien, reposemos toda esa información y nos planteemos si es la opción correcta para nosotras.
